por El Profesor
Tres Hombres Generosos de la Isla de Bretaña:
Nudd el Generoso, hijo de Senyllt,
Mordaf el Generoso, hijo de Serwan,
Rhydderch el Generoso, hijo de Tudwal Tudglyd.
Y el mismo Arturo fue más generoso que los tres.
TYP, 2 (Pen. 16, 45)
En 1961, la profesora Rachel Bromwich de la Universidad de Cambridge publicó la primera edición de su estudio crítico sobre las Tríadas de la Isla de Bretaña. Desde entonces, la profesora Bromwich ha publicado sucesivas ediciones ampliadas en 1978 y 2006. Si bien la profesora murió en 2010, el legado de su obra ha sido fundamental para los estudios sobre literatura medieval y el ciclo artúrico, por lo que en un sincero acto de amistad y amor sus amigos y colegas completaron una cuarta edición, publicada por la Universidad de Gales en 2014. Es a partir de esta edición que realizaremos un comentario sobre las Tríadas y su valor como fuente documental primaria para el conocimiento de las tradiciones galesas de la Edad Oscura.
El uso del tres es común entre los pueblos celtas, y aparece de forma recurrente en sus leyes, tradiciones, religión y literatura. Las Tríadas de la Isla de Bretaña son una colección de fórmulas que recogen los principales motivos y personajes de la tradición bretona insular, elementos de una tradición que sirvió para conformar la identidad nacional de todos los bretones y que conservaba el ideal de soberanía y unidad de toda la isla de Bretaña (op. cit.: lvii y ss.). Cuando la cultura bretona quedó relegada a Gales, las Tríadas se repitieron y repitieron una y otra vez, de forma oral y escrita, y gracias a ello han podido llegar hasta nosotros. En Gales, las personas encargadas de narrar los relatos antiguos eran los Cyfarwydd, o narradores. Existía algún tipo de distinción entre éstos y los bardos cortesanos que residían junto a los grandes señores y componían obras para ellos, aunque es difícil de interpretar con los datos de que disponemos hoy (op.cit.: lxix). Los aprendices de ambos oficios debían memorizar las Tríadas como parte de su formación, por lo que fueron concebidas como una forma mnemotécnica de aprendizaje.
Principales versiones de las Tríadas
Debido a su proceso de formación y conservación, existen numerosas versiones de las Tríadas. Todas ellas proceden de una serie de volúmenes que forman parte de la colección denominada Hengwrth-Peniarth Manuscripts, guardada actualmente en la Biblioteca Nacional de Gales. El conjunto cohesionado de todos los textos da un corpus de 97 tríadas, si bien no existe ninguna fuente primaria que incluya la lista completa, además de haber varias variaciones en el orden y número de las tríadas, así como desdobles de algunas, y cambios entre ellas.
A la hora de reconstruir el total de las 97 tríadas que forman la compilación de toda la tradición galesa, la profesora Bromwich reconoce dos versiones principales: la Versión Primitiva y la Versión Tardía (Early Version y Late Version).
La Versión Primitiva está representada por dos textos principales. El más antiguo que se conserva procede del manuscrito Peniarth 16, escrito entre los siglos XIII y XV (op. cit.: xvi), seguido de cerca por el Peniarth 45, datado también en el siglo XIII, y cuyo redactor debió utilizar el Pen. 16 como recurso, más que copiarlo directamente (op. cit.: xviii-xix). En estos textos, la última tríada escrita es la número 46, mientras que la Tríada 1 puede componerse con la lectura combinada de ambos.
La Versión Tardía está representada por dos textos conservados en el Libro Blanco de Rhydderch y el Libro Rojo de Hergest, dos importantes compilaciones de literatura galesa datadas cerca de los años 1350 y 1400, respectivamente (op. cit.: xx). Estos textos poseen correspondencias muy cercanas entre sí, en una versión que puede ser incluso algo anterior a la fuente de los Pen. 16 y 45 (op. cit.: xxii). De ellos proceden las tríadas 47 a 69.
Otros manuscritos Peniarth poseen un listado de las tríadas 70 a 97, principalmente conservado en los textos Peniarth 47 y Peniarth 50 (op.cit: xi).
Datación de las Tríadas
Establecer una cronología sobre la creación de las Tríadas es difícil, ya que es posible que fueran compuestas en momentos diferentes, además de que en su proceso de formación eran parte de una tradición oral, que sólo siglos después comenzó a ponerse por escrito (op. cit.: xii; lxxxvii). Con las pruebas internas de los diferentes textos conservados, la profesora Bromwich considera que todas las versiones derivan de un texto o textos primitivos que pueden fecharse en mediados del siglo XIII, o incluso del siglo XII (op. cit.: xc, nota 149; xcix). A la vez, algunas referencias a algunas tríadas en diferentes poemas antiguos, pertenecientes al Libro de Taliesin o el poema épico «Y Gododdin», permiten datar aproximadamente la existencia de una versión oral de las tríadas ya en el siglo IX o X (op. cit.: lxxxviii; xcix). De todas ellas, las más antiguas son sin duda las llamadas Tríadas de los Caballos.
Las Tríadas de los Caballos, «trioedd y meirch», forman un grupo a parte de las Tríadas de Bretaña propiamente dichas, y aunque están incluidas dentro de los manuscritos compilatorios, aparecen diferenciadas de las demás (op. cit.: lxxx-lxxxi). Estas Tríadas de los Caballos reflejan una lista de nombres de caballos pertenecientes a diferentes héroes cuyos nombres aparecen también en las Tríadas de la Isla de Bretaña. Todos los caballos presentan alguna característica fabulosa, ya sea porque poseen cuernos, pueden nadar, o portar cargas imposibles. La transmisión de estas tríadas ha sido muy confusa, ya que tanto los nombres de los caballos como los de sus propietarios varían según la versión. La profesora Bromwich sugiere (op. cit.: lxxxi) que esta confusión puede demostrar la antigüedad de la misma, cuando pertenecía a la transmisión oral, y por ello pudo haber formado parte de una tradición diferente, que el momento de la puesta por escrito de las tríadas acabó incluyéndose en su corpus común.
En otros casos, referencias a distintos sucesos políticos o a personajes históricos permiten establecer una fecha de redacción post quem de algunas tríadas en torno al sigo XII. Así, la tríada 1 hace referencia a la controversia religiosa sobre la sede obispal de Saint David, una disputa eclesiástica ocurrida a mediados del siglo XII (op.cit.: xci). En otras tríadas, números 55, 60, 65, 68 y 69 aparecen nombres de reyes de la región de Powys, haciendo referencia a diferentes tradiciones y cuestiones de la política de esta región de Gales también a mediados del siglo XII (op.cit.: xcvi-xcvii). También aparecen dos personajes históricos, Alan Fergan y Gilbert de Clare, muertos a principios del siglo XII (op. cit.: xcii-xciii).
En las diferentes versiones el orden de las tríadas varía. En su edición, la profesora Bromwich mantiene el orden dado en el manuscrito Pen. 16, cuyo listado se asemeja a los libros de Rhydderch y Hergest. Encontrar el orden en que las tríadas aparecían en el texto primitivo no es posible. Aún así, si atendemos a los manuscritos conservados, sí pueden sacarse algunas conclusiones. Por ejemplo, tanto el Pen. 16 como el Pen. 45 comienzan con la Tríada 1, pero es muy posible que esto sea una adición del siglo XII y que la primera tríada en la versión original perdida fuera en realidad la Tríada 2, «Tres Hombres generosos de la Isla de Bretaña», la más famosa y conocida de las tríadas, citada por numerosos poetas medievales galeses a la hora de comparar a sus patronos (op. cit.: xci). Es también probable que las tríadas más antiguas sean aquellas en las que los nombres son clasificados bajo un epíteto concreto, sin ninguna explicación. Las tríadas con una redacción mayor incluyen explicaciones de los personajes y sucesos referidos en la tríada, textos que suelen aparecer en un momento en que la tradición había comenzado a olvidarse, y el escriba o redactor se ven en la necesidad de añadir una información extra que ya no es del dominio común o que no resulta fácilmente entendible (op. cit.: xcv-xcvi). Por ello puede concluirse que aquellas que poseen mayor desarrollo escrito fueron incluidas después que las más sencillas o directas.
Las Tríadas como fuente de tradición
La versión original de las Tríadas de la Isla de Bretaña como parte de una tradición oral muy anterior a su puesta por escrito se percibe en la forma y estructura de las tríadas tal y como fueron redactadas en el texto primitivo y en sus versiones posteriores. Estos elementos son, por un lado, la distribución de las tríadas en grupos y en pares de elementos opuestos, y también la agrupación según un mismo epíteto o una temática común: así, tríadas agrupando a personajes magos, a mesnadas fieles y traidoras, o muertes afortunadas y desafortunadas, etc. Otro elemento son las variaciones que aparecen a veces en los nombres relacionados con un epíteto determinado en diferentes versiones de las tríadas. La sustitución de estos nombres personales sucede generalmente con epítetos de elogio, que no están relacionados con una historia definida detrás de ellos, lo que facilita la confusión memorística pasado el tiempo (op. cit.: lxxxix-lc). Estas técnicas tienen sentido si formaban parte de una fórmula de memorización facilitada gracias a la agrupación de conceptos similares. Lo que era una necesidad memorística acabó siendo una convención literaria, por lo que incluso algunas estas tríadas originales aparecen mucho después como secciones sueltas que se repiten de forma constante en las diferentes versiones de las tríadas conservadas por escrito (op.cit.: lxxxviii).
El conjunto de las Tríadas de la Isla de Bretaña hoy conservadas debió formar una pequeña parte de toda la tradición oral galesa medieval que hoy no podemos recuperar. La profesora Bromwich entiende que el núcleo original de las Tríadas correspondería a esta tradición oral que supone la base más antigua del pueblo galés y de las antiguas tradiciones de la Bretaña anterior a las invasiones anglosajonas (op.cit.: lv). Se trata, por tanto, de una guía de las tradiciones, personajes y relatos que componían toda la tradición medieval galesa, y posiblemente un conjunto de tradiciones comunes del pueblo bretón desaparecidas con la imposición cultural de nuevos pobladores.
La profesora recoge un listado sobre las obras literarias al margen de las Tríadas propiamente dichas que sirven para conocer los relatos y temas de la primitiva tradición cultural britana (op.cit.: lv-lvi):
– Los poemas recogidos en los cuatro principales libros de tradición galesa: el Libro Negro de Carmarthen, el Libro Rojo de Hergest, el Libro de Taliesin y el Libro de Aneirin.
– Nombres recogidos en el folklore galés, y sobretodo en Culhwch y Olwen.
– Material preservado en la obra de Gildas, del Historia Brittonum y de su anexo de los Mirabillia, y también de algunas antiguas genealogías familiares.
– Paralelismos y referencias en poemas y obras de la Plena Edad Media, comenzando por la obra de Geoffrey de Monmouth, así como muchas semejanzas con diferentes relatos irlandeses.
Todas estas fuentes formarían el corpus de relatos mitológicos y tradicionales más antiguos de la cultura bretona, o al menos la tradición antigua del pueblo britano tal y como lo entendían los literatos y bardos galeses que pusieron por escrito estos textos a partir del siglo XII (op.cit.: lvi, lxi, lxv-lxvi). Estos relatos eran los siguientes:
– La historia del origen troyano de los Bretones y la historia de Beli Mawr, el dios fundador de todas las casas reales galesas, tradiciones recogidas en el Historia Brittonum.
– Los personajes de las cuatro ramas de los Mabinogion.
– La historia de Maxen Wledig.
– La saga de Caswallawn.
– El ciclo artúrico, con Arturo, Cai, Llachau y Medrawt como algunos personajes principales.
– Algunos relatos que aparecen reflejados en Culhwch y Olwen.
– Las batallas de Badon, Camlan y Arfderydd.
– Tradiciones sobre los reyes Urien Rheged y Owain, del Viejo Norte.
– El núcleo de la historia de Taliesin.
– Algunos personajes de la antigüedad clásica y de materia bíblica.
El aspecto que más destaca dentro de las Tríadas de la Isla de Bretaña es cómo en ellas se percibe la emergencia del mito artúrico y su cada vez mayor importancia (op. cit.: lviii, lxvii), que atomizaría gran parte de la tradición a partir de la obra de Geoffrey de Monmouth.
Este proceso comenzó en un momento muy temprano, muy anterior a la obra de Geoffrey de Monmouth, pero después de ella, a partir del siglo XIII, Arturo y su corte se asimiló tan estrechamente a la tradición literaria que muchos personajes sin relación original con Arturo fueron asociados a él, y en las tríadas la fórmula «ynys Prydein» o «de la isla de Bretaña» fue sustituida por «llys Arthur», o «de la corte de Arturo». En este momento, sin embargo, gran parte de la esencia original del mito britano ya se había perdido o resultaba extraña, y los epítetos y nombres sacados de las tríadas eran utilizados por su valor antiguo, pero habían perdido su sentido original (op. cit.: lxiv, lxix).
Bibliografía:
BROMWICH, R. (2014): Trioedd ynys Pryfein. Cardiff: University of Wales Press.